jueves, 8 de septiembre de 2011

La crisis energética mundial y el crecimiento económico

Si alguna certeza podemos tener en la vida es que la energía es la fuente de todo crecimiento y es la responsable de que la sociedad occidental sea tan compleja y moderna. Sin energía , la sociedad no hubiese desarrollado el alto nivel de industrialización que tiene. Sin energía , no se hubiese podido dar lugar a las especializaciones como la ingeniería mecánica, la neurocirugía, el cine, el desarrollo de aditivos alimentarios, etc. Pero no solo le debemos  el florecimiento de la sociedad, podemos decir sin miedo a equivocarnos que la energía es vida. Desde el momento en que nos desplazamos, pasando por los latidos del corazón hasta los alimentos que ingerimos, todo ello se puede expresar en unidades energéticas. La energía lo es todo. Por consiguiente , cuando hablamos de ella, no nos referimos a temas muy técnicos y complicados de entender, estamos hablando de supervivencia. En tal sentido , hablar en términos monetarios, mencionando cifras de PIB, Ingreso Per Cápita  e IPC, resultaría siendo menos importante para nuestras vidas en sociedad, porque lo realmente trascendente es la energía, y en este caso el término más  relevante ,con diferencia, es la energía neta. Pero ¿Qué es la energía meta? Es el cociente que resulta de dividir la energía que obtenemos entre la energía que invertimos. Pongamos un ejemplo, necesitamos alimentarnos para vivir y, por tal motivo, cultivamos nuestra propia comida. Pero ese proceso de cosechar nuestros propios alimentos implica una inversión de energía. Solo si la energía que obtenemos de los alimentos es superior a la que invertimos en el trabajo de cosecharlos, ósea si tenemos un superávit energético, solo en ese caso podremos sobrevivir. Si conseguimos 200 calorías de los alimentos y gastamos en su producción 10 calorías podemos determinar:
 Energía obtenida/energía invertida: Energía Neta
200 calorías/10 calorías: 20 calorías netas
20 calorías serían la energía neta o la ganancia energética. Esto quiere decir , que solo necesitamos invertir una caloría para obtener 20 calorías del entorno.
Si produjésemos 20 calorías por 1 caloría gastada definitivamente podríamos vivir. Ahora bien, ¿saben cuánta energía neta necesito el hombre para ser capaz desarrollar sociedades con algunas especializaciones de trabajo, y pequeños y rústicos comercios propios de la épocas medievales?  Necesito solo 1,2 calorías de energía neta. Lo que significa que por cada caloría invertida (gastada) , producía 1,2 calorías. Ese 20% de excedente energético fue suficiente para que el hombre desarrolle técnicas de navegación, orfebrería, industria de guerra, comercio, etc.
Eso nos lleva a la siguiente conclusión: la sociedad crece y se desarrolla siempre y cuando exista energía excedentaria.
También lo podemos ver de otra forma: cuánto menos energía excedentaria exista, menos compleja será la sociedad.
 Con esta premisa, si nos vamos a un escenario dramático pero bastante realista (que podría ocurrir en los próximos años), donde hay un déficit de energía, ósea por cada unidad energética que gastamos obtenemos menos de esa unidad, ¿Qué creen que ocurriría con la sociedad y por ende con nosotros sus ciudadanos? Simplemente la sociedad se extinguiría, y nosotros con ella. Solo para sobrevivir, me refiero a solo alimentarnos, necesitaríamos obtener un par de centésimas de excedente de lo que gastamos en energía. Por tanto, en un planeta donde las fuentes energéticas cada vez son más escasas , lo único que nos debería importar es el concepto de energía neta porque en su fórmula matemática está encerrada la clave del futuro de la humanidad.







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